Río Ceballos, 27 de Junio de 2015

Vivir En Las Sierras Sin Agua Potable Y Sin Gas

A Sólo 30 Km. De La Segunda Ciudad Del País, Estamos Como “Cuando Vinimos De España”

 Por Lic. E. Ariel Rodríguez y Lic. F. Inés Sucunza

Les preguntamos a las autoridades que nos representan: ¿Cómo vivir sin agua potable, sin sufrir diarreas o colitis? y ¿Sin gas en pleno invierno sin padecer de hipotermia, -entre otros males-?

Vivimos en Río Ceballos en el año 2015, y el agua de red que maneja la Cooperativa de Agua quien dice que la misma es “potable” y se cotiza como tal, es intomable.  Nosotros tenemos un filtro del tanque, que dura no más de tres meses, lo sacamos y está de color marrón oscuro, con verdín, sarro, moho, etc. El agua que sale luego de ese filtro, tiene un olor a cloro alevoso.

Luego tenemos un segundo filtro, para que le saque las bacterias y el cloro, filtro que se cotiza muy caro, siendo producto nacional, que también no dura más tres meses, por la baja calidad de agua.  En su envase dice que debiera durar un año.  Sumado a esto cerraron las importaciones del filtro, que tiene una calidad un poco mejor, y que viene del extranjero.

Luego de eso, debemos hervir el agua, con un gas, que no hay, porque los trabajadores, que cargan las garrafa y/o que proveen el gas envasado “están de paro por tiempo indeterminado”, uno se pregunta, en tiempo de elecciones los dos partidos o tendencias mayoritarias, se disputan el poder, ambos se proponen con la falacia de que son “el cambio”, cuando han gobernado por décadas, la argentina; muchas provincias y ciudades, estamos en el siglo XXI y tenemos que vivir como en la época de Cristo, es más por lo menos en su época, podían buscar agua potable en pozos comunitarios, acá ni siquiera eso, acá “poniendo estaba la gansa”, es decir el cash lo tenés que poner sino te cortan el agua hiper hipoclorada.  Hacés un reclamo y dicen que van a mandar un “ingeniero para que tome una muestra”, nunca ves al ingeniero y tampoco al comprobante de que hiciste el reclamo.

Estamos en una ciudad de más de 40.000 habitantes, y estamos peor que los  pueblos de las películas del lejano oeste, en cuanto a las carencias en calidad de vida y de comodidades básicas en relación a una vida digna.

Todo pasa por el gobierno nacional, que si dá lo que le corresponde a la provincia para hacer el tendido de gas natural, pero no se lo dá porque es de otro color político el gobierno provincial, y así es el cuento del nunca acabar, de la buena pipa, no fui yo, fue él, o no, fueron los gobiernos anteriores, bla, bla…

Focalizándonos en el paro por tiempo indeterminado, de los trabajadores que  proveen el gas envasado, es necesario que el señor gobernador tome en cuenta la gravedad que esto implica para todos aquellos que vivimos en pueblos y ciudades de la provincia de Córdoba en donde no hay tendido de red de gas natural. En nuestro caso nos quedaran no más de 7kg de gas en una garrafa, para vivir unos pocos días. Luego estaremos a la buena de Dios, sin tener con que hervir el agua, producto básico para la subsistencia, y ni poder cocinar los alimentos necesarios para vivir.

A todo esto hablar de calefaccionarse con gas envasado es un lujo que uno no se puede dar, la leña está carísima, $250 pesos los 100kg, y para variar la electricidad, no tiene la potencia que debiera tener, por lo tanto una estufa eléctrica no tiene la potencia óptima, y las variaciones de tensión, te la pueden quemar en cualquier momento.  

Por todo lo antes dicho, reclamamos a la autoridad que le competa, a nivel nacional, provincial y municipal que el agua de red sea verdaderamente potable, inodora, incolora, e insípida, la proveniente de la Cooperativa de Agua S.A. de Río Ceballos; y una pronta solución a la falta de gas envasado, estamos en invierno y es una necesidad para poder vivir una vida digna.